El proyecto consiste en la repoblación de 31,0 ha en un monte de propiedad pública perteneciente a la Junta Vecinal de Vallejimeno, en la provincia de Burgos. Se trata de un rodal organizado en tres parcelas colindantes, localizado en una zona con una pendiente media en torno al 30%, con exposición dominante a solana, con buena calidad de suelo, sin procesos erosivos extremos apreciables, en una región donde abundan los pinares de albar y robledales. Presencia habitual de cérvidos y algo de ganado. El área de actuación inicialmente estaba cubierto de brezo de altura media 2 m. Todas las parcelas se han instalado con el mismo modelo. Se ha realizado una plantación mixta de conífera y frondosa, con una densidad de 1.100 pies/ha (10% Pinus pinaster, 80% Pinus silvestres, 5% Sorbus aria y 5% Sorbus aucuparia) en un marco regular 3x3, instalando la frondosa en bosquetes en las áreas de menor pedregosidad y vaguadas. Se ha evitado el roble, porque regenera de forma natural en esta zona, y se ha introducido el pino resinero porque es más resistente a los periodos de sequía. Apertura de hoyos con retroaraña, desbroce previo con desbrozadora de cadenas, respetando el regenerado de roble y pino, plantación manual. Instalación de protectores de tubex de 1,5 m. en la frondosa para evitar el daño de cérvidos en el regenerado, y se ha vallado todo el perímetro, por parcelas, para evitar la intrusión de ganado. La planta cumple con todos los requisitos de calidad y procedencia establecidos por la JCyL para este tipo de restauraciones. Se ha construido una pista que ha permitido el acceso durante los trabajos de plantación además de servir para la defensa contra incendios forestales. Otros usos secundarios en expansión a destacar serían la caza y el aprovechamiento micológico. Se trata de una zona rural con alto valor paisajístico y etnográfico que sufre de despoblamiento, con una economía basada en el turismo rural, los aprovechamientos de madera y algo de ganadería, con una amplia tradición maderera. Las absorciones previstas para un periodo de 40 años son de 4.404 t CO2 eq estando disponibles 801 t CO2 eq de las cuales se han retirado ya 500 t CO2 eq. Las parcelas cuentan con un Plan especial con un horizonte temporal de 40 años en el que los trabajos previstos han sido la reposición de marras y podas de penetración. La gestión del monte se suele hacer con la empresa CRECE que se encarga de asesorar a la Junta Vecinal, y propone intervenciones a través de ayudas estatales y autonómicas. Los terrenos y el vuelo pertenecen a la Junta Vecinal, pero las emisiones han sido adquirirdas por un particular que comercia con ellas.